“hombro contra hombro luchando en este mar. Y
a remar, a remar"
Todos
debemos remar, de una forma o de otra siempre hay que remar, en cualquier
dirección, pero remar, y a remar.
Para
nosotros lo más importante es ( o pretendemos que sea) remar en la misma
dirección, remar por este mar de la educación.
Sabemos
que es un mar que en ocasiones está revuelto y otras veces demasiado calmado, ni
una cosa ni otra es la correcta, pero tampoco están equivocadas.
Nosotros,
en nuestra clase, queremos remar juntos y en la misma dirección, porque no es lo
mismo remar juntos que en la misma dirección. Pensamos que para remar en
distintas direcciones siempre hay tiempo y seguro que lo habrá, ahora eso no
nos interesa.
Al
remar juntos está claro que no todos lo hacemos conla misma intensidad, fuerza, ganas,
entusiasmo...pero cuando a alguno de nosotros nos falte algo de esto, siempre
habrá otro que lo ponga y así sucesivamente...
Tenemos
claro que todo esto es muy difícil, pero no imposible. Además como todavía no
tenemos clara la regla de la “mp”, en vez de escribir imposible, escribimos
posible...ya tendremos tiempo de aprender a poner m antes de p...
Poema que hemos trabajado en clase y si además se mezcla con la lengua de signos...pues nos mola más, porque nos recuerda nuestra actuación en el Festival.
Dentro de las definiciones de la
palabra impermeable, me interesa esta: sobretodo hecho con tela impermeable.
El poco tiempo que llevo de
maestro he observado que los alumnos ya no traen impermeables al colegio.
Cuando yo era estudiante era raro el niño que no iba con impermeable a clase,
incluso cuando no llovía, bastaba con un día un poco nublado para ponernos
nuestros impermeables. Incluso los maestros llevaban impermeables.
Puede que sí o puede que no,
pero tratando este tema del impermeable a modo de analogía, observamos que hoy
día los alumnos expresan más sus opiniones. Esto no quiere decir que siempre
sean del agrado de los maestros, pero son sus opiniones al fin al cabo. Ahora los
niños hablan mucho, no suelen estar en silencio en las clases. Puede ser porque
no traen impermeables.
Cuando yo era estudiante no
se hablaba en clase, todo lo contrario, había un silencio...espeso, esa es la
palabra, espeso. Puede ser porque nosotros sí llevábamos impermeables al
colegio, y ya se sabe que impermeable es un adjetivo que significa impenetrable
y hermético. No deja entrar nada, pero tampoco deja salir nada. Por este motivo
no hablábamos nada en clase, porque no podíamos decir nada, pero también había
el riesgo de que no nos entrara nada.
Por eso me alegro mucho de no
ver impermeables en los colegios, en mi clase no caben los impermeables mentales,
creo que debemos empaparnos. Lo digo en plural, debemos empaparnos todos,
docentes y discentes, si no, no hay proceso.
Ahora que lo pienso, hace tiempo
que no veo botas de gomas en los colegios, “las Katiuskas”...
Desde pequeño
he escuchado en el colegio la famosa frase:
“El burro delante
para que no se espante”
Y de
tanto escucharla, he pensado que nos puede servir para nuestra clase...
Por eso
hemos decidido que la vamos a utilizar muy a menudo, pero vamos a cambiar un
poco su significado.
Lo de
burro nos gusta, porque nos parecen unos animales muy salaos.
En nuestro
día a día intentamos aplicarnos esta frase para favorecer las relaciones entre
el equipo que formamos en nuestra clase.
Hemos comprobado
(y muchas veces) que es muy fácil decir lo que otros compañeros hacen mal, pero
es tremendamente difícil decir qué hacemos mal cada uno de nosotros. Por eso nos
hemos empeñado en intentarlo. Está claro que nos costará tiempo y trabajo, pero
tenemos todavía mucho curso por delante.
Para ello,
siempre que queremos contar algo sobre un compañero, vamos a pensar en el
burro, y nos pondremos nosotros delante. De este modo queremos reflexionar
sobre las cosas que hacemos mal cada uno de nosotros. De esta manera mejorará
el equipo, está claro que si cada uno vamos haciendo menos cosas mal, esto será
muy beneficioso para nuestro grupo.
De ahí
que todos tenemos presente nuestra frase:
“El burro delante
para que no se espante”
También escuchaba muy a menudo: “cuéntalo en alto y nos reímos todos”, lo mismo también nos puede servir para algo...
Según
la definición del diccionario, bumerán o búmeran significa:
“arma arrojadiza,
propia de los indígenas de Australia, formada por una lámina de madera curvada
de tal manera que, lanzada con movimiento giratorio, puede volver al punto de
partida”
Para efecto bumerán
dice: resultado de una acción que se vuelve contra su autor.
Partiendo de estas definiciones,
nosotros (mis alumnos y yo), trabajamos el efecto bumerán en nuestra clase
todos los días. Con esta analogía, pretendo que mis nenes comprendan la
importancia que tienen cada una de sus acciones, ya sea una acción buena y
adecuada o una acción mala o inadecuada.
Para nosotros todo lo que
hacemos y no hacemos, se transformará en el efecto bumerán, así todo lo que
proyectamos en nuestra clase, nuestro entorno escolar y por expansión en
nuestra sociedad puede volverse contra nosotros o a favor de nosotros.
De esta manera, toda acción
buena seguro que conlleva recibir una acción buena, y una acción mala seguro
que conlleva recibir una acción mala, porque todo se puede volver en nuestra
contra, en contra de cada autor.
Por este motivo intentamos, y
digo intentamos ya que hay veces que no se consigue, pensar que nuestras
acciones pueden volverse hacia nosotros al igual que el efecto que hace un
bumerán, de esta manera intentamos que todas las acciones (vuelvo a decir
intentamos) que realizamos sean las mejores posibles, porque pueden volverse lo
mismo que un bumerán...
También podemos pensar que no
siempre se cumple ese efecto bumerán, que hay veces que se lanza un bumerán y
no vuelve, pero por ahora, gracias a la inocencia propia de la edad, pensamos
que nuestro bumerán siempre vuelve, porque para nosotros, por ahora, todo es
posible.